Fernando III el Santo cumplió su promesa de levantar una ermita a la Virgen de Valme tras ganar Sevilla en Reconquista, hecho que parecía providencial, dado el mal estado de sus ejércitos. Fue en noviembre de 1248. El tercer domingo de octubre se realiza la romería de la Virgen de Valme que conmemora este prodigio, aunque en tiempos se celebraba el segundo día de la Pascua de Pentecostés.

La ermita que construyera Fernando III se situó en las tierras del Cortijo de Cuarto. El rey Fernando III depositó también el primer pendón arrebatado a los moros y actualmente se conserva en la Iglesia de santa María Magdalena en Dos Hermanas.

Tradicionalmente se ha trasladado a Nuestra Señora de Valme a Dos Hermanas para paliar épocas de sequía, de epidemias y otras catástrofes.

La reconstrucción de la ermita y la restauración del pendón fernandino dieron un nuevo auge a esta romería, siendo en 1859 cuando se inauguró la nueva capilla. Hoy día 7 kilómetros separan Dos Hermanas del Santuario de la Virgen de Valme y la romería comienza cuando los romeros depositan a la Virgen en su carreta para ir desde la Iglesia de Santa María a la ermita del Cortijo de Cuarto. En el mismo día, la Virgen hace el camino de vuelta, previo rezo del Santo Rosario.