Las romerías de Arteixo al santuario de La Virgen de Pastoriza se celebran cada domingo de octubre.
Dicho santuario fue restaurado en los años setenta y esa restauración hizo y hace posible todas las celebraciones. Se trata de un edificio barroco, construido sobre una pequeña ermita románica de la que existen pocos vestigios.
La imagen de La Virgen fue decapitada por hordas de sujetos politizados e irracionales de los que lamentablemente habrá siempre. Fue restaurada.
Existe la creencia de que la Virgen apareció bajo una piedra de origen dolménico y se practica el ritual de pasar debajo de esta piedra.
Muchos devotos creen que este gesto libera de los padecimientos reumáticos articulares y sigue practicándose en parte por devoción y en otra por tradición.
Tras la peregrinación al santuario, se procede a la celebración de misa solemne y actos religiosos, para, posteriormente, tener comida romera en los campos que rodean al santuario.